En el sistema de
gobierno democrático pocas palabras
pueden competir en importancia con el verbo “representar” y sus derivados. La
razón por la que unos líderes acceden a cuotas de poder mayores que los demás
ciudadanos, ya se trate de lo ejecutivo, lo legislativo o lo judicial, es
porque se supone que representa a sectores amplios o significativos de la
sociedad, por eso todo político en sus cabales debe asegurarse de que sus
electores se vean representados en él, o ella, según sea el caso.