En
Colombia en la actualidad ha pasado algo
interesante. Es decir votar por el plebiscito de paz.
- Voto a conciencia.
- Me gusta el cese al juego.
- Me gusta la intervención de la comunidad internacional. (Especialmente la ONU).
- Impunidad de delitos por parte de la FARC. Esto me hace pensar largo y tendido.
Post
conflicto.
Sanar las heridas, el
conflicto viene de la insatisfacción, del ego que se nos sube.
Una
reflexión budista sobre la paz, nos viene al caso no como acción de fe sino filosofía.
Habla sobre él Zen, es una
escuela del budismo que busca liberarnos del sufrimiento. Nace en Japón.
En el Zen somos responsables
de nosotros mismos, el budismo nos enseña que nosotros tenemos una insatisfacción.
El hombre tiene comportamientos para buscar repetir, el placer pero evitando el
sufrimiento, por lo tanto sufrimos por las ideas que tenemos. La práctica de la
meditación que es el fundamento del Zen.
La paz a nivel social no es
posible hasta que los individuos no estén en paz consigo mismo, el ser humano
construye un yo a partir de ideas. Nos relacionamos no con las situaciones sino
con las ideas, el mapa no es el territorio, sino lo que es un individuo y la
suma de seres.
Con la sociedad nos relacionamos,
con envidia, búsqueda de placer, actuando como «venenos de la muerte»
«Todo lo que tu pienses por
mas bueno que sea, en lugar del planeta habla alguien que piense distinto a ti» aportar la solidaridad. Si no se respeta
la forma de pensamiento del otro, a pesar de las diferencias no se puede
construir una paz.
La
ética del budismo es la compasión, los preceptos budistas no son reglas que no garanticen
algo, son guías para evaluar la conducta.
El
Zen produce una transformación real.